Supongamos que Lilita le da consejos a Cristina para manejar la economía nacional. Lo ideal sería que le de algunos consejitos a Fabiana para por lo menos arrancar este barco que hace más de seis meses no se mueve.
Supongamos que el gran ideólogo o bien poderoso que inició la debacle de De La Rúa, fue el mismo que limpió a Rodríguez Saa de la presidencia para luego asumir. Supongamos que fue el mismo que no permitió el regreso de Menem apoyando a Nestor. Supongamos que el tema de la 125 fue para medir fuerzas y rearmarse para limpiar el gobierno de Cristina.
Supongamos que Duhalde está rearmando lo que se inició en el 2001 como Movimiento Productivo Argentino (MPA) que lo componen: Alfonsín, Buzzi, Anchorena, Llambías, Peirano, Posse y Felipe Solá entre otros. Que el propio Menem está incorporándose en lo inmediato.
Supongamos que toda la farsa de la interna justicialista en el último Congreso fue para distraer lo acordado por debajo de la mesa, Manfredotti presidente del partido provincial y Cóccaro vice, obviamente perfilados con esta mafiosa línea encabezada por Duhalde y opuesta a un gobierno nacional y popular.
Algunas de estas suposiciones pueden ser realidad, por eso debemos estar atentos para evitarlo.